Hace apenas unos día que acabó la primera edición del Campus Botanícula que he organizado con Isa en su taller: El Taller de Isa, en Güemes… y ya estamos manos a la obra organizando la siguiente edición que tendrá lugar la semana del 1 al 5 de Agosto y ya está prácticamente completo 🙂
Por si no has leído entradas anteriores, el Campus Botanícula es una semana repleta de talleres matinales de dibujo, creatividad y reciclaje en el precioso taller de Isa entre los verdes campos y colinas de Güemes.
Almorzamos a la sombra de un enorme árbol junto a un riachuelo lleno de renacuajos, libélulas y otros bichos, hacemos yoga en una ermita pequeñita y muy fresquita, trabajamos todos juntos en una mesa enorme con unas vistas difíciles de superar, cruzamos la carretera casi casi sin mirar porque verdaderamente, por aquí no pasa nadie… hay una calma difícil de encontrar en esta zona de Cantabria tan explotada por el turismo.
Estamos tan contentas con la acogida del proyecto y hemos visto a los y las peques tan contentos e ilusionados que nos vamos a liar la manta a la cabeza y vamos a organizar una tercera semana!!
Gracias a todas las familias bonitas que se han entusiasmado con nuestro proyecto y nos han animado a organizar mas y mas 😀
Como decía, han sido unos días geniales, rodeadas de niños y niñas majísimos y súper trabajadores!! Se han sumergido en nuestras propuestas de cabeza y sin flotador!! Han sido unos días de intenso calor que a mi me hacía andar y pensar como a cámara lenta y ellos y ellas dándolo todo. Jajajaj
Aquí te dejo unas cuantas imágenes 🙂
Isa y yo, cuando comenzábamos a dar forma a este proyecto, decidimos ponerle un nombre a cada semana de talleres para que tuvieran una temática, un hilo conductor. La primera semana se llamó Botanícula y preparamos un montón de propuestas y experiencias entorno al mundo vegetal. Entre todos hemos llenado de vida a un esqueleto de árbol: el lunes las RAICES, el martes el TRONCO, el miércoles las RAMAS, el jueves las HOJAS y FLORES y el viernes le han salido algunos FRUTOS y algunos HABITANTES han venido a ocupar sus ramas.
Hemos diseñado y creado nuestra propia semilla inventada, hemos transplantado plántulas a las que les habían salido sus primeras raíces y hemos aprovechado para hablar de las distintas formas que tienen las plantas para reproducirse, hemos escondido animales en el tronco de un árbol y también hemos fabricado una lupa mágica para poder encontrarlos, hemos hecho papel reciclado con papeles de fotocopias que salieron del tronco de un árbol, hemos creado personajes con ramitas de árboles recogidas en la playa, hemos dibujado sobre madera con ayuda de la luz del sol y una lupa…
Hemos aprendido a relajarnos y estirar nuestro cuerpo haciendo la postura del árbol y otras muchas, hemos decorado una bolsa de tela (para llevarnos luego todas nuestras creaciones) estampando con hojas de árboles y también hemos aprendido trucos para crear texturas interesantes con acuarelas para pintar flores únicas, hemos identificado los árboles a nuestro alrededor y hemos cogido con cuidado algunas hojas para secarlas en nuestra prensa…
Teníamos una egagrópila en perfecto estado y la hemos desmenuzado para ver los restos de qué roedor había dentro y tras concluir que eran de un ratoncito, hemos buscado una imagen de cómo es su esqueleto y lo hemos intentado recomponer… y cuándo nuestro árbol ya estaba precioso y lleno de detalles, el viernes hemos inventado unos pájaros para que vinieran a vivir en él. ¿Qué os parece? Decir que han sido unos peques súper trabajadores ¡es poco!
La edición de la primera semana de agosto es, más o menos igual a esta porque en cuanto abrimos las inscripciones vimos que había muchos más interesados que los que caben en el taller de Isa, así que decidimos repetir con diferentes niñ@s (aunque hay un par que han acabado tan contentos e interesados en las propuestas que han querido repetir ♥).
En cambio, para la tercera edición ya estamos preparando una temática nueva y, por consiguiente, otro montón de actividades nuevas entorno a esta nueva temática que pronto desvelaremos 🙂
Porque había muchos otros niños del primer campus que querían volver pero querían hacer cosas nuevas (son insaciables!)
